Gracias a su pureza, la Sal Rosa del Himalaya nos puede resultar muy útil para aliviar ciertos problemas de salud o cutáneos. Veamos cuales.
Tomar un baño con esta sal es recomendable para el alivio de los dolores reumáticos, revitaliza la piel, nos relaja y renueva nuestra energía. Disuelve entre 200 y 300 gr. de Sal del Himalaya en la bañera con agua caliente y relájate durante treinta minutos.
Disolviendo la sal en agua destilada puedes producir tu propio suero fisiológico para tratar las congestiones nasales, o hacer gárgaras si tienes inflamación de garganta. 10 gr. de Sal por Litro de agua.
Va genial en el tratamiento del acné, disuelve la sal del Himalaya en agua destilada, si añades unas gotas de Aceite de Rosa Mosqueta mejoraras la cicatrización, empapa un algodón con el preparado y practica una limpieza de cutis, déjala actuar durante unos minutos y después aclara. Utiliza 20 ml. de agua saturada al 70% de Sal y 6 gotas de Aceite de Rosa Mosqueta.
En la cocina puedes sustituir la sal de mesa común por la Sal del Himalaya, si, también contiene cloruro sódico, pero te vas a beneficiar del resto de minerales que no posee la sal común.
Producto natural 100%
La Sal Rosa del Himalaya contiene 84 minerales de los 92 que nuestro cuerpo contiene de forma natural.
Sal de roca (Cloruro sódico)
Calcio, magnesio, sulfuro y hierro entre otros muchos.
Producto de Pakistán.
La Sal rosa del Himalaya puedes usarla de varias formas:
-Baños Relajantes, disolver en agua caliente ente 200 y 300 gr. de Sal.
-Limpiezas faciales disolver en agua destilada saturada al 70% de Sal.
-Apta en cocina para cocinar y sazonar. Moliendo la sal.
Conservar en lugar seco y protegido de los rayos solares directos.